Dr. Bienvenido Segura
Santiago Rodríguez, R. D.
Email: biensegura46@hotmail.com
Unidad para la recuperación nacional
En su paso por
Lo que ha pasado en el país no tiene precedentes. De acuerdo a la opinión de expertos la cantidad de agua que recibió el suelo dominicano en esas 24 o 48 horas es equivalente al total de la esperada para todo el año. A partir del análisis de esa información se puede definir la real magnitud de la tragedia que ha afectado a la gente de
La producción nacional fue sensiblemente maltratada sobre todo en lo relativo a los cultivos agrícolas y a la ganadería. Apenas hubo unos pocos territorios que no fueron afectados por Noel y hay otros pueblos donde los daños causados no fueron significativos si se evalúan desde el punto de vista de la pérdida de vidas. Hay que resaltar que los organismos de socorro y las instituciones gubernamentales vinculadas a las acciones de asistencia inmediatamente pusieron en marcha el Plan de Contingencia para dar respuesta a los diversos problemas generados por la tormenta. Las instancias agrupadas en el CNE dan muestras de que trabajan como un gran equipo al coordinar todas y cada una de las intervenciones que llevan a efecto.
El Presidente de
La generosidad de la comunidad nacional se pone de manifiesto desde el mismo instante en que se dan a conocer las informaciones relativas a los daños materiales, muertes y desapariciones de dominicanos y dominicanas. Los socorristas y una inmensidad de héroes anónimos exponen sus vidas dejando solos a sus familiares para realizar labores de rescate a favor de las personas que han sido arrastradas por las aguas y que esperan por alguien encima de techos y árboles para salvar sus vidas. Los funcionarios del gobierno junto a síndicos, legisladores, miembros de la defensa civil, cuerpos de bomberos, sacerdotes, pastores de iglesias evangélicas y de otras denominaciones, clubes, núcleos de profesionales y técnicos, asociaciones de productores agropecuarios, grupos de mujeres, deportistas, transportistas, empresarios, comerciantes, profesores, estudiantes y otras organizaciones de base son protagonistas de la jornada de solidaridad y amor más intensa que se recuerde en beneficio de victimas de un desastre natural tan impactante y devastador como Noel. Lo mismo ocurre con países y gobiernos hermanos cuyas ayudas oportunas han contribuido a mitigar el dolor del pueblo.
Las únicas acciones que se cuestionan frente a esta situación de calamidad nacional son las relacionadas a la politiquería barata llevada a cabo por politiqueros baratos. Es motivo de preocupación la actitud vil e inhumana asumida por algunos candidatos presidenciales y dirigentes políticos de partidos opositores ante esta tragedia. No es de cristianos tomar como tema de propaganda y pretender hacer campaña electoral con los daños materiales y las muertes provocadas por este fenómeno de la naturaleza. Diseñar y construir discursos sobre los cadáveres aún recientes de nuestros hermanos y hermanas dominicanos idos a destiempo al ser arrastrados por las embravecidas aguas de esta tormenta es no sentir el más mínimo dolor ante la desgracia y la tristeza de los demás. Apelo a la sensatez de la clase política para que sea respetada la dignidad y el buen nombre de las victimas y sus familiares. Las condiciones de marginalidad social y económica en las que ellos vivieron no pueden alimentar el morbo y la maldad de los que hoy quieren aprovecharse de ésta tragedia para sacar capital político-electoral. Dios perdonará a los que actúan de esa manera, pero el pueblo en su momento se lo tomará en cuenta.
No obstante las adversidades